lunes, 21 de abril de 2014

HABIA UNA VEZ... (chata tachata tachán)... ¡UN CIRCO!

Cuando yo digo que aquí no nos privamos de nada... por algo lo digo.

Hoy, sesión de circo. Y que traen hasta animales. Parece mentira que en un pueblo pequeño haya tantas cosas. Pero sí. Hoy ha llegado...

  ¡EL CIRCO!



Les hemos sorprendido esta mañana en plena faena de levantar la carpa, y allí estaban, en el aparcamiento del autobús, con todos sus camiones y sus trastos.

Es un circo francés, que se llama Cirque Prin y tienen su página web con toda la información sobre su historia.

En un periquete montan todo el tinglado, porque ayer a la tarde no había nada y para hoy al mediodía ya estaba todo en perfecto estado de funcionamiento.



Y lo que más impresiona: El camello/dromedario, o el dromedario/camello, que nunca tengo claro cual es cual.

No hay comentarios:

Publicar un comentario