Ya he dicho que el verano de 2017 ha sido "muy ocupado"... y cuando tienes cuatro niños en casa y hay que entretenerlos de alguna manera... todas las actividades se hacen pocas!
Una "Búsqueda del Tesoro" sirve para una mañana (tempranito, eso sí, que a partir de una hora determinada, no hay cristiano que salga a patear las calles (38 grados!)...
Hay que organizar una fiesta de cumpleaños (18!), con invitación a medio pueblo para tomar tarta... (creo que conté treintaytantos jóvenes)...
Entre que vas a cortar unas cañas, quitarles las hojas, y montar la cabaña, ya se te va más de una tarde...
Los lápices, rotuladores y ceras siempre dan juego. Y duran un buen rato.
Y en las fiestas también se entretienen, claro.
Y entre comer, salir de paseo... un poco de juegos en el campo de fútbol... se pasan las dos semanas previstas. Con los niños contentos (o eso espero), y los abuelos ¡¡AGOTAOS!!
Y cuando acaba todo, acompañarles al bus de regreso a casa...
Y FIN DEL VERANO!!!