Ayer fue el gran día, el encuentro con mi casa ya terminada... o "casi" terminada, porque quedan algunos detalles y remates pendientes, y la cocina está aun sin hacer. Tenemos la cocina provisional en el patio, y con eso nos iremos apañando cuando queramos ir en los próximos días. Ya está pintado todo de blanco, lo que le da una luminosidad estupenda, pero como se puede ver aquí al lado, en esa habitación falta el zócalo, y así hay detalles que faltan... ¡por toda la casa!
El baño del segundo piso tiene un toque de color: un ocre amarillo muy potente, que le da una vida y una luz tremenda. ¡Me encanta!
Por otra parte, aún tenemos amontonamiento de objetos, muebles, enseres y cajas. Muchas cajas. Veremos lo que contienen la semana próxima (en este momento, ni que me maten me acuerdo de lo que guardé en ellas), cuando vayamos a instalarnos unos días y poner todo en marcha. Y de momento están ocupando toda la futura cocina.
Me he lanzado a poner estas fotos del resultado final porque estoy tan contenta con cómo está quedando todo, que no he podido resistirme. Pero seguiré paso a paso el desarrollo de la obra con sus fotos pertinentes, para que todo quede bien documentado para el futuro (jaja).
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