Al final del primer tramo de escalera, en el mini-descansillo, un peldaño a la derecha para entrar a la Habitación Menorca y otro a la izquierda para el pasillo hacia el baño.Pero para entrar al baño, ¡hay que bajar uno!
Para la Habitación Balcony, también hay que bajar, pero para entrar a la Habitación Siglo XX, previamente tendremos que subir. Una ensalada de subidas y bajadas que, al principio, te vuelven loco y te procuran más de un traspié. Claro que al final te acostumbras, pero eso no quita para que haya que andar con mucho cuidado.
Una vez pasados todos esos "arribas y abajos", llegamos al segundo tramo de escalera que nos llevará al segundo piso:
Se mire por donde se mire, la escalera está torcida y desnivelada. Los escalones no son paralelos, ni del mismo tamaño (en altura ni en profundidad); son de colores "variados", y de materiales diversos. Vamos, un muestrario en toda regla. Pero eso me gusta. Desde luego, no se puede negar que es original, y como todo en esta casa, tiene su encanto. Lo mismo que la ventanita que se abre a lo alto de la escalera, que también tiene gracia. No cierra bien y no tiene cristales, está hecha una pena... O sea, se cuela el aire y el frío, y no deja pasar la luz, pero me gusta, y ya la arreglaremos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario