
A la una de la mañana, después del toro de fuego; el bingo y la música, chupinazos desde el ayuntamiento y orquesta amenizando el ambiente.
Mucha gente con velitas y todos coreando a la orquesta.
En el entremedio de estos días, nos invitaron a un aperitivo (gran aperitivo), que prepararon los del pipero que está frente a nuestra casa. Ahí se ve la entrada: en la calle Corralaz.
Aclaro que un pipero es el equivalente a una sociedad gastronómica en el País Vasco. Y este es un pipero pequeñito (le llaman el "pocositio") de gente marchosa, muy amable y a los que les gusta mucho la fiesta... e invitaron a todo el barrio. Prepararon un ágape por todo lo alto; pintxos y más pintxos y bebida a mansalva. Además amenizado por Los Mirandeños, que ofrecieron todo su repertorio de jotas y habaneras.
Insisto en lo de que el pipero es pequeño, pero eso no les preocupa demasiado. Cuando tienen algún evento en el que se juntan todos los amigos, se montan el comedor en la calle, y... ¡ancha es Castilla!Aclaro que un pipero es el equivalente a una sociedad gastronómica en el País Vasco. Y este es un pipero pequeñito (le llaman el "pocositio") de gente marchosa, muy amable y a los que les gusta mucho la fiesta... e invitaron a todo el barrio. Prepararon un ágape por todo lo alto; pintxos y más pintxos y bebida a mansalva. Además amenizado por Los Mirandeños, que ofrecieron todo su repertorio de jotas y habaneras.
Además lo ponen tan bonito y arreglado que da gusto verlo. Parecía la feria de abril de Sevilla.


A lo dicho: hasta el año que viene, mirandeses!
No hay comentarios:
Publicar un comentario